El hijo de la novia: el afecto sobre todas las cosas

//Por Jesica Khadjoyan

La segunda película de Juan José Campanella cuenta una historia encantadora y sobre todo muy emotiva, donde lo humano sobrepasa lo material, y amor supera a todas las complicaciones de la vida. La historia se centra en la vida de Rafael Belvedere (Ricardo Darín) , un cuarentón agobiado por los negocios y la rutina, donde no solo lidia con los problemas que le acarrea el regenteo del restaurante de su padre, sino que además tiene problemas con su novia Naty (Natalia Verbeke), y con su ex esposa Sandra (Claudia Fontán), quien le demanda que pase más tiempo con Vicky, su hija.
Como si sus problemas no fueran pocos, su padre, Nino, le plantea que quiere casarse por Iglesia con su mamá, quien padece el mal de Alzheimer. Si bien Nino (Héctor Alterio) está casado con Norma (Norma Aleandro) hace 44 años por civil, le manifiesta a su hijo que le dio todos los gustos, menos el de casarse de blanco.
Rafael está pintado como "el argentino promedio", donde muestra permanentemente una aspiración a "ser alguien", a necesitar la aprobación de los demás, pero especialmente de su mamá, ya que necesita que ella sienta orgullo por él.
Esta angustia y sus mismas frustraciones, llevan a Rafael a un infarto que lo deja de cama en el hospital. Es allí cuando se plantea la posibilidad de aprobar el casamiento de sus padres, pese a la enfermedad de Norma, y comienza a ayudar a su padre para lograrlo. Todo esto coincide con la reaparición de Juan Carlos -su amigo de la infancia-, y la decisión de vender el restaurante y comenzar un proyecto propio de vida.

El resultado final es una peli llevadera, con muchos momentos de risa y emoción, diálogos entretenidos y muchos chivos, típicos de las producciones de Pol-ka.


Como siempre, los consejos para estar a tono con la peli:
-No te levantes del sillón cuando empiezan los créditos. Te vas a perder el verdadero final de la película.
-Alquilátela en dvd, descorchá un vinito de 10 pesos para arriba y aprovechá para disfrutarla con buena compañía hoy, que mañana es feriado.
-Uno de los principales escenarios de la película es el restaurante "Belvedere", por lo que te va a agarrar un ataque de hambre. Te recomiendo unos spaghettis rodeados de queso port salut y regianitto. Quedan muy ricos y son más baratos que el invento de Rafael.


Dejo el trailer para engancharse:





Ficha Técnica
Título original: "El hijo de la novia"
País: Argentina
Año: 2001
Género: Comedia Dramática
Duración: 100 minutos
Dirección: Juan José Campanella
Producción: Adrián Suar
Reparto: Ricardo Darín, Héctor Alterio, Norma Aleandro, Natalia Verbeke, Eduardo Blanco, Claudia Fontán, Salo Pasik y Gimena Nóbile.

Nueces para el amor: una buena de industria nacional

//Por Jesica Khadjoyan

Unos pochoclos o un flancito con dulce de leche, bastan para acompañar esta deliciosa peli: otra más de las pertenecientes al rubro "de llorar". Si querés estar a tono con la película, conseguí unas nueces, que te ponen fuertes para el amor, según el director Alberto Lecchi, y tiráte en el sillón más cómodo con una cajita de pañuelitos de papel tissue a mano, y preparáte para ver una película donde el amor aparece con nombre y apellido. Con Ariadna Gil, Gastón Pauls, Nicolás Pauls y Malena Solda, esta película relata la historia de dos adolescentes que se conocen en el tren de la línea Roca, a la salida del último recital de Sui Generis.
En plena década del 70, donde el hippismo, las previas de la dictadura y el nacimiento de los primeros amores eran los protagonistas, Marcelo y Alicia quedan flechados y deciden volver a encontrarse. Él, tiene su debut sexual con ella y sólo piensa en mentiritas piadosas para volver a verla. Ella, un par de años más grande que él, trabaja como voluntaria enseñando a leer y a escribir en una villa, estudia una carrera y milita políticamente. En el transcurso de los últimos días de presidencia de Isabel Perón, Alicia decide dejar de ver a Marcelo, primero porque lo ve muy diferente a ella y después porque Horacio, su novio, está terminando de hacer el servicio militar.

Unos años más tarde, Marcelo se convierte en un economista casado que está en Madrid, España por un congreso. Alicia vive en ese país con Cecilia, su hija de 5 años: allí se encuentran accidentalmente y quedan en volver a verse en una fiesta que dará Alicia en su casa. Marcelo asiste, pero Alicia no le da el lugar que él espera. Una escena imperdible: él yéndose en un taxi al aeropuerto, con el corazón roto por la indiferencia de Alicia, y escuchando por radio la noticia de que la Argentina acaba de perder la guerra por las islas Malvinas en 1982.

Ocho años después, Alicia está de vuelta en Buenos Aires porque siente nostalgia, y se encuentra nuevamente en el tren a Marcelo, esta vez junto con su esposa Claudia (Nancy Duplaá), y sus dos hijos. Vuelven a intercambiar números de teléfono, y esta vez se concreta el encuentro que no pudo ser cinco años atrás. Pero Marcelo no se siente preparado para dejar a su mujer, pese al notorio amor que siente por Alicia.

La cuarta parte acontece en blanco y negro. Marcelo no está en un buen momento con su mujer. Alicia ha tenido varios intentos de suicidio y su hija planea irse a vivir nuevamente a España. Marcelo comienza a sospechar que podría llegar a ser el padre de Cecilia. Una vez que la contacta, le propone hacerse una prueba de ADN. Cecilia no quiere, pero luego termina cediendo. Comienza a tener una relación casi paternal con ella, pero a Claudia no le gusta la situación y en un ataque de celos, echa a Marcelo de la casa. Mientras, Alicia sufre una nueva crisis y la internan. Es allí cuando ella se da cuenta de lo injusta que fue con Marcelo. Se da cuenta de que está enamorada de ese hombre y que con él podría haber sido muy feliz. En ese momento, decide volver a la estación de tren para recordar el momento en que lo conoció, sin sospechar que él estará ahí esperándola.


La música es muy funcional, triste pero acorde con las escenas más fuertes y la temática romántica/dramática de la película. La mayoría suceden en la última parte, que resulta ser más nostálgica, agudizada además por el efecto blanco y negro. El final, intenta enseñarle al espectador que -por más que a veces las personas parezcan muy diferentes-, si tienen que estar juntas, el destino los va a unir contra cualquier adversidad.

Ficha Técnica
Título original: "Nueces para el amor"
Producción: Argentina - España
Año: 2000
Duración: 107 minutos
Género: Drama
Dirección: Alberto Lecchi
Reparto: Gastón Pauls, Ariadna Gil, Malena Solda, Nicolás Pauls, Nancy Duplaá, Lola Berthet, Gabriel Goity, Rodrigo de la Serna.

Puntos de vista: una mirada al terrorismo

//Por Jesica Khadjoyan

¿Qué pasa con los cineastas estadounidenses que tanto flashean en sus películas con la vida del Presidente en peligro? En el cine pensaba lo graciosa que resulta la manera en que se presenta al personaje de Presidente de los Estados Unidos en diversas películas. Un buen ejemplo son: "Avión Presidencial", "El día después de mañana" (en la que el mandatario perdona la deuda latinoamericana con tal de que los evacuados puedan refugiarse en México), y el mejor de todos es este: Puntos de vista.
El director Pete Travis nos muestra en su primera producción al presidente, Ashton, tan preocupado por el terrorismo que organiza una cumbre pública por la paz, que tiene lugar en la Plaza Mayor de Salamanca, España. A pesar de un fuerte operativo de seguridad y de estar acompañado por sus guardaespaldas Thomas Barnes y Kent Taylor, el presidente Ashton sufre un gravísimo atentado que será visualizado, una y otra vez por ocho diferentes puntos de vista que arman la película y atan cabos haciendo una de acción imperdible, en la cual los grupos terroristas se encuentran tan organizados que conocen a la perfección la forma de infiltrarse en los sistemas de seguridad presidenciales, y hasta las reacciones ante diversas situaciones de peligro.
Esto le da mucha sal y pimienta a la película, ya que además de volver varias veces a un punto de partida desde la mirada de cada personaje, hace retrocesos y avances continuos, dejando siempre en suspenso la escena final de cada punto de vista. En los retrocesos, se asemeja a El efecto mariposa. En la trama organizada de los terroristas, a Duro de matar 4.0. Impecable.
Dennis Quaid, como siempre, interpreta al héroe (Barnes) que, como buen guardaespaldas de Ashton, estará siempre dispuesto a arriesgar su vida y enfrentarse a los malos.
Matthew Fox, en la piel de Taylor -su compañero-, deja todo en suspenso hasta bien entrada la mitad de la peli. Aunque hay que aclarar que al muchacho, que hace de médico "bueno" en Lost, le caen muy bien los papeles como éste, con más tintes de acción.
No falta la persecución automovilística, ni el villano que aparentaba ser justiciero, ni el personaje que se gana el corazón de los espectadores (Forest Whitaker). Con la ayuda de este último y de Rex Brooks -la productora del canal oficial, interpretada por Sigourney Weaver- Barnes logrará desarmar la red y encontrar al Presidente, a quien protegerá de forma incondicional.

El resultado final es un film conciso, dinámino y que no aburre sino más bien todo lo contrario. Atrapa desde el primer segundo. Recomendadísima para este fin de semana con lluvia, acompañada de unas buenas porciones de pizza napolitana con faina, y cerveza Quilmes Stout.


Vean el trailer para más datos:



Ficha Técnica
Título original: "Vantage points"
Año: 2008
Género: Acción / Thriller
Duración: 90 minutos
País: Estados Unidos / España
Dirección: Pete Travis
Guión: Barry Levy
Reparto: Dennis Quaid, Matthew Fox, Forest Whitaker, Sigourney Weaver, William Hurt y Eduardo Noriega

Lost: estreno de la cuarta temporada

//Por Jesica Khadjoyan

Hoy salimos de la pantalla grande para pasar a la pantalla chica, con motivo del estreno en Argentina de la cuarta temporada de Lost, una serie por demás conocida que cosechó pasiones y adicción entre sus fans desde el principio de su existencia, el 22 de septiembre de 2004.

La cita se dará esta noche a las 21 por la señal de cable AXN. Sin embargo, más de un fanático ya pudo ver hasta el quinto capítulo bajado de internet: estos episodios pululan por la web con subtítulos incluídos al día siguiente de su estreno en Estados Unidos. Impresionante, ¿no?

El último episodio de la tercera temporada de esta serie fue transmitida 8 meses atrás, lo cual significa una eternidad para un seguidor de Lost. Todo esto, sin contar el hecho de que el paro de los guionistas estadounidenses, comenzado en diciembre del año pasado, dejó en stand by muchas otras series solicitadas, como Prison Break, 24, y Héroes. Se llegó incluso a decir que los guiones ya no existían, que los habían quemado, pero sólo se trató de rumores para impacientar a los fans.

¿Y en qué consiste Lost, que se convirtió en pasión de multitudes? Para los desconocedores en la materia, el argumento se basa en la historia de un grupo de sobrevivientes que quedaron varados en una isla luego de un accidente de avión correspondiente al vuelo 815 de Oceanic Airlines, que iba de Sydney (Australia) a Los Ángeles (Estados Unidos).
Se centra, no sólo en cómo los personajes tienen que sobrevivir y sortear diferencias y dificultades de todos los colores, sino también en flashbacks que, de a poco, van delantando quiénes y cómo eran ellos antes del accidente: a qué se dedicaban, su familia, sus frustraciones, sus sueños, y en cómo llegaron a Sydney, y a tomar precisamente ese vuelo.
Las primeras tres temporadas de la serie se centraron en esos flashbacks que tanta forma de daban a la serie. Se dejó entrever que varios de los personajes se habían cruzado antes del accidente, y demás cuestiones, como la aparición de otra gente en la isla. El último capítulo de la tercera temporada dió a entender mediante flashforwards -o sea, saltos al futuro-, que finalmente sí hay vida después de la isla.

El primer episodio, The Beginning of the End no decepcionará a los fans: según Clarín.com, sí sucederá algo así con The Economist, el tercero. Algunos rumores son que Hurley (Jorge García) tendrá visiones y realidades algo monstruosas, relacionadas con muertos; Locke (Terry O'Quinn) pasará de ser el "malo" a terminar teniendo la razón en muchas de sus actitudes inexplicables. Ben (el verdadero malo que interpretó Michael Emerson) atado y sometido será más peligroso que en libertad; y Jack (el lindo de Matthew Fox) dejará finalmente de ser más bueno que Lassie para dar paso a una nueva faceta.

Uno de los padres de la serie, J.J. Abrahams, ya confirmó que existirán seis temporadas en total. Entre la cuarta y la sexta, y con muchísimo más suspenso, los sobrevivientes tendrán alguna que otra chance de salir de la isla, pero -lo logren o no- se darán cuenta de que están irreversiblemente ligados a esa isla, tanto física como emocionalmente.
Habrá que esperar y seguir viendo.